Cuando hablamos sobre desarrollo humano hacemos referencia al proceso por el cuál las oportunidades de crecimiento tanto personal como psicológico se extienden; para esto es necesario la creación de un entorno donde haremos realidad nuestros objetivos y vivamos de forma productiva. Para lograr un desarrollo efectivo se requieren diversos factores. Por ejemplo, el ambiente y la herencia interactúan de manera continua para influir en él.
Desde el punto de vista psicológico, la herencia hace referencia a las características físicas que los padres trasmiten a sus hijos por medio de los genes.
Esta también juega un papel muy importante en la conducta del individuo debido a que repercute en el sistema nervioso y en el desenvolvimiento en su entorno.
El ambiente abarca varias influencias, según Donald Hebb: el ambiente químico, el químico postnatal, experiencias sensoriales constantes, experiencias sensoriales variables y eventos físicos traumáticos.
Las condiciones ambientales y la herencia modifican al individuo y juntos conforman a éste.
Es de suma importancia la cultura y el contexto social en donde el individuo se desenvuelve porque, debido a estos factores, van a permitirle actuar de manera eficaz e independiente en su entorno, permitiéndole aprender a pensar a solas o con ayuda de alguien más, creando así un estado mental de funcionamiento superior. Para ampliar estas opciones es fundamental construir capacidades humanas como: llevar una vida larga y saludable, tener acceso a los recursos que permitan a las personas vivir dignamente y tener la posibilidad de participar en las decisiones que afectan a su comunidad. Sin estas muchas de las opciones y oportunidades simplemente no existen o son inaccesibles. La meta es la libertad humana. Las personas deben ser libres de realizar sus opciones y participar en las decisiones que afectan sus vidas.
Por esta razón, las personas son el centro del desarrollo, ya que ellas pueden construir las condiciones para que todo sea posible. “El desarrollo de la gente, por la gente y para la gente”.
Un proceso de Coaching es básicamente un proceso de Desarrollo Humano, en donde el cumplimiento de objetivos se mezclan con las capacidades personales, brindando un estado de realización personal y/o profesional.
