Misión es la finalidad o propósito que se debe alcanzar, es la razón de ser, lo que justifica nuestra existencia, lo que creemos que vinimos a hacer en esta vida. Tenemos que empezar a definir nuestra misión de vida que es el eje central que guía nuestras decisiones, ayudándonos a fijarnos metas y asignarnos prioridades. Si no tenemos claridad al respecto no existirán metas sólidas, no habrá enfoque en nuestras acciones y es posible trabajar diariamente durante muchos años, sólo para descubrir que lo que se ha logrado no ha traído la satisfacción personal que se busca o desea. En muchos casos descubrimos con tristeza que nuestro trabajo nos ha alejado de lo que verdaderamente anhelamos, llevándonos incluso a la dirección opuesta de nuestras metas.
Visión: Es mirar el pasado, presente y futuro con un enfoque positivo y real. Cada momento y cada instante hacemos historia. Dejamos huellas en el pasado, pensamos en el presente y nos proyectamos para el futuro para marcar hitos de trascendencia. Hacer historia es tener visión de vida, misión de vida, objetivos de vida y metas de vida.
No ha habido héroes sin visión. Todo hombre que ha surgido en defensa de la soberanía de algo tuvo un proyecto de visión. La visión es configurar o trazar la mirada hacia la excelencia. ¿Hacia dónde se quiere llegar? ¿Qué es lo que se quiere lograr? ¿Por qué y para qué lograrlo? ¿Cómo y cuándo lograrlo?
No sólo se trata de ver con los ojos físicos; es imaginarse lo que deseamos ser. Un proyecto de vida reconoce la visión para marcar huellas, esta hace que se lleve el acto de liberación, porque la libertad que el hombre obtiene es el producto del proyecto La visión es elaborar un proyecto de liberación histórica, porque enfoca al futuro, el pasado y el presente, ya sea este para mejorar la calidad de vida, ser un profesional, servir a otros con amor, conocer la verdad, etc.
“Creer en algo y no vivirlo es deshonesto”
Gandhi
